martes, 14 de noviembre de 2006

Hola Isabel
Hará casi 10 años que me diagnosticaron la enfermedad de Parkinson.
Quisiera hacer saber a la sociedad que es el Parkinson, según mi experiencia y la de algunas personas afectadas, y contaros lo que es esta enfermedad y la variedad de síntomas que tienen y como pasamos en cuestión de segundos de estar bailando o caminando a quedarnos rígidos, parados o caminar torpes e inseguros como si fuéramos borrachos.

El Parkinson es una de las enfermedades mas terribles que hay, por la enorme cantidad de síntomas que trae consigo, podíamos decir que son muchas enfermedades en una.
Empieza con rigidez, lentitud, torpeza y ligeros temblores, que con el tiempo nos va invalidando haciéndonos perder nuestras facultades motoras que nos impide hacer cierto tipo de manualidades nos obliga ha dejar el trabajo, a no poder escribir, ni vestirnos, calzarnos o comer solos, pues acaba dejándonos en un estado de gran invalidez, sin poder valernos por nosotros mismos, teniendo que depender de otra persona.
Bien podía llamarse tortura, pues según algunos neurólogos no mata, pero no nos deja vivir.

Estos son algunos de los síntomas que con el tiempo se irán apoderando de nuestro cuerpo.
rigidez muscular, el temblor, lentitud, torpeza, dolores, cansancio, sudar excesivamente, problemas respiratorios, de orina y estreñimiento, de visión, babeo, trastornos del sueño, dormir pocas horas por las noches pues te despiertas dolorido con rampas y tirones en las piernas y con un temblor incontrolado, durante el día puedes dormirte en plena conversación e incluso de pie, dificultad para hablar y vocalizar bien, hablando cada vez mas flojo, teniendo que repetir las cosas dos veces o más, movimientos esporádicos, perdida de memoria depresión, ansiedad, pesadillas y hasta alucinaciones.
sensación de inquietud interna incapacidad de mantenerse quieto ya estés sentado o de pie, lentitud de movimientos voluntarios y motores, congelación de la marcha, te quedas bloqueado como si tus pies fueran un bloque de cemento y no puedes moverlos.
Entrando en un estado off, con un mal funcionamiento clínico debido a la ausencia del efecto de la medicación, que nos deja como la palabra dice sin pilas, parado incapaz de dar un paso.

Cuando me dijo el neurólogo que tenia Parkinson ni me inmute, pues lo único que sabia de la enfermedad era lo que había oído por televisión, que estaban avanzando mucho con el tema de las células y que su curación estaba cerca.
Pregunte al neurólogo el cual me informo bastante bien de lo que era la enfermedad y sus síntomas incluso me dio un libro para una mejor información que por el momento no tenia cura, que eso de que la curación estaba cerca que no hiciera caso y que si algún día llegase ese momento pasaría algún tiempo, hasta que diera las suficientes garantías por si tenia efectos secundarios, eso fue en febrero del 1997,
Con la información suficiente y cuando empiezas a notar sus síntomas, es cuando ves realmente lo que es el Parkinson y es aquí cuando por tu cabeza pasa de todo.
Cuando estas bien informado, te das cuenta que la mejor calidad de vida, eres tu mismo, almacenar tu mente de ganas de vivir, de energía positiva y afrontarlo con valentía coraje y la fuerza de voluntad que haga el resto, pues no quiero acabar postrado en una silla de ruedas, tengo 49 años y mi mujer y mis hijos con 11 y16 años dependen de mi y no estoy dispuesto ha ser una carga para ellos.

No puedo hundirme ni entrar en una depresión de la que no pueda salir, aunque será muy duro querer y no poder valerte por ti mismo, pero tengo que ser positivo y mantener mi mente serena, por esas criaturas, por mi mujer y por mi mismo, he de hacer todo lo posible por vivir el día a día, sin importarme que la gente me vea temblar o que me confundan con un borracho, procurare estar lo mas activo posible, tratando de mejorar mi estado físico y confiar siempre en la persona que sin tener Parkinson, este dispuesta a luchar con el como si lo tuviese.
Debo vivir con la esperanza puesta en esa calidad de vida que tanto añoro.
Jesús Barroso Chacón.

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